Conocí a un chanero de una tierra antigua
quien dijo: «Cuatro enormes tréboles levitan, sin su tronco
se yerguen en el silicio. A su lado, en los tablones,
semihundido, yace un rostro hecho pedazos, cuyo ceñoquien dijo: «Cuatro enormes tréboles levitan, sin su tronco
se yerguen en el silicio. A su lado, en los tablones,
cuentan que sus escultores comprendieron bien esas pasiones
las cuales aún sobreviven, grabadas en esos inertes archivos,
a las manos que las dibujaron y al corazón que las alimentó.
"Mi nombre es Pepe, meme de memes:
¡Contemplad mis obras, poderosos, y desesperad!"
Nada queda a su lado. Alrededor de la decadencia
de estas colosales ruinas, infinitas y desnudas
se extienden, a lo lejos, las solitarias y llanas hileras»